martes, 11 de diciembre de 2012

“Celso Emilio Ferreiro, no seu centenario”

Recital Poético-Musical
Celso Emilio Ferreiro, no seu centenario”
Venres, 14 de decembro, ás 18 hs,
na Rúa Celso Emilio (esquina a Mayola) 
fronte ao Instituto de Canido – Ferrol
Organizan e participan:
    A Revolta de Trasancos, Ateneo Ferrolán, Bartoleta Teatro, Fuco Buxán, I.E.S. Canido, Lefre de Caldereta, Muiño do Vento, Poesía Salvaxe - Lendo Poesía.
Imágenes integradas 1


lunes, 10 de diciembre de 2012

Llegan las cartas del nómada dorado

Llegan las cartas del nómada dorado

 

El escritor Bruce Chatwin, en una imagen tomada en París. / ULF ANDERSEN (GETTY)

A punto de cumplirse 23 años de su muerte, ¿qué nos queda de Bruce Chatwin? Los viñedos de Afganistán, el anhelo de Persépolis bajo la lluvia, las pisadas de las gacelas en la arena africana, los alminares de Jam, los arriates de rosas en los jardines de Istalif, el canto perdido de un viejo aborigen en los desiertos de Australia, toda Patagonia, un vehemente deseo de belleza y libertad... No hemos sido tan afortunados como Werner Herzog, que heredó su baqueteada mochila. Pero es igual, mientras tengamos sus libros, unas botas y un destino (¡y una Moleskine!), Chatwin seguirá con nosotros.

"Era una fuerza de la naturaleza", me dice otro gran viajero, Colin Thubron, que lo conoció bien. "Muy obsesivo, tremendamente hablador cuando tenía una idea en la cabeza (que era casi siempre). Violentamente imaginativo más que juiciosamente erudito, y ciertamente no académico. Te sentías arrastrado por la pura fiebre de su entusiasmo".

No sé, es pensar en el rubio Bruce y sentirse invadido de un deseo de partir y de una rara melancolía que se extiende como un hermoso vellón dorado sobre el extenso suelo del mundo. El James Dean de los viajes, el Alejandro de los trotamundos, el culto, narcisista y bisexual efebo errante, Bruce Chatwin (1940-1989) alzó la antorcha de su vida —que acabó abrasándolo— para señalarnos la dirección de una existencia nómada en caminos, intereses y afectos. ¿Adónde hubiera llegado? Rushdie, su amigo, ha dicho que Chatwin solo estaba empezando y que únicamente hemos podido ver el primer acto de lo que hubiera podido llegar a ser. Cruzó los límites entre la ficción y la no ficción, viajó como una efervescente rencarnación de Rimbaud. Era capaz de hacer un viaje para ver la armadura de un mongol disecado en el desierto de Sind, motivarse con un trozo de perezoso gigante y hasta tuvo de mascota una pitón. ¿Cómo no rendirse a alguien así?

Era una fuerza de la naturaleza”

Colin Thubron

Ahora llegan sus cartas (y que emocionante es pensar que arriban desde esa inexorable frontera que no vuelve a cruzar viajero alguno) para iluminar el trayecto intelectual y vital de un personaje cuya dimensión se agiganta con el paso del tiempo. Le muestran más inseguro que sus (seis) libros, más humano, vulnerable, inquieto e impaciente. Automitificador, snob, poseur, deseoso de impresionar, sí, pero, como dijo nada menos que Robin Lane Fox: "boy, he knew"; vamos, que ¡sabía de todo!-. Lleno de planes volátiles y viajes que nunca se realizan. Y muy preocupado, obsesionado incluso, por las cuestiones económicas.

Bajo el sol (Sexto piso) es una selección de varios centenares de cartas enviadas por Chatwin —incluyendo postales (como la del Zamzama, el cañón de Kim, en Lahore; o la del cráneo de Cromañón, en Les Eyzies) y algún telegrama—, que ha realizado su viuda Elizabeth Chatwin en colaboración con el notable biógrafo del escritor, Nicholas Shakespeare. La colección, minuciosamente anotada y comentada, abarca cuarenta años. Arranca con una carta de Bruce a sus padres en mayo de 1948, desde el colegio, y acaba con otra dirigida al propio Shakespeare el 29 de diciembre de 1988 (Bruce murió el 18 de enero siguiente, cuatro meses antes de cumplir los 49 años), escrita por mano de Elizabeth. De hecho las últimas cartas de Bruce Chatwin, estragado por el Sida, las dictó todas a su mujer ("tengo las manos entumecidas y soy incapaz de usar las piernas"). Entre la primera y la última, como una caravana de papel que atravesara el mundo hasta sus confines, se extiende el increíble y fascinante itinerario de un alma inquieta devota como pocas de lo exótico y lo hermoso. A destacar que son el único material que Chatwin nunca corrigió.

El James Dean de los trotamundos se carteó con Brenan, Ivory y Sontag

El reguero de cartas se puede leer, recalca Shakespeare, como una suerte de autobiografía en zig-zag y lo más cercano posible a una conversación con Chatwin. Su trabajo en Sotheby's, los estudios de arqueología, la fascinación con los nómadas, la génesis de los libros, los viajes, su etapa de periodista (entrevistó a Malraux, a Mandelstam, a Indira Gandhi -en una carta recuerda jocoso como un mono con mastitis trataba de levantarle el sari a la primera ministra-), la vida mundana a la que era tan adepto (“escoltando a Jacqueline Onassis a la ópera el jueves”), la ruptura con Elizabeth (pese a que su mujer le dejaba vivir libre sus aventuras, las de mochila y las otras), y la vuelta con ella, el rosario de dolencias provocadas por el Sida…

En una carta desde Niamey, Níger, dice que ¡se ha dejado bigote! ("por primera vez me deshago del espantoso aspecto de niño bonito y puedo otear la posibilidad de hacerme mayor si no con dignidad al menos con cierto estilo"), y afirma sentirse, entre tuareg, bouzous, peulhs (de los que anota el rumor de que cambian de sexo en ciertas estaciones del año), hausas y camellos, "very Beau Geste". En otra explica cómo se pasea "COMPLETAMENTE DESNUDO" (sic) , excepto las botas, por las montañas de Oregón, para sorpresa de un guardabosques. En un fuerte rajputa antigua propiedad de un coronel de los Lanceros de Jodhpur, fuma ganja y mientras nosotros diríamos tonterías él rompe a recitar en sánscrito las primeras estrofas del Bhagavad Gita, ¡qué tío!

Los documentos se pueden leer como una autobiografía en zig-zag

Entre los destinatarios de sus cartas, Elizabeth, sobre todo; su familia ("Querida mami, ¡Afganistán, al fin!", Herat, 1963) y amigos, sus editores y una buena lista de personajes célebres, entre ellos Susan Sontag—-a la que recuerda el fantástico rato que pasaron juntos ¡comiendo entrañas en Chinatown! y hace reflexiones amargas sobre la Guerra de las Malvinas-, James Ivory, del que fue amante, según su biógrafo, y al que llama Jungle Jim("Mauritania, nada excepto hombres azules caminado a través de paisajes naranjas y púrpuras"), Gerald Brenan, al que explica cómo fue a Ouidah en la costa de Dahomey y encontró la pista de De Souza, tratante se esclavos y virrey del reino africano…

También están entre los correspondientes Paddy Leigh Fermor, de cuya casa en el Peloponeso Chatwin era un asiduo y en las cercanías de la cual se esparcieron sus cenizas ("te buscaré el diccionario comparativo de lenguas indoeuropeas en Blackwell's y te lo traeré de regalo"), Desmond Morris (con el que habla de un niño lobo indio), Roberto Calasso, Paul Theroux, o Colin Thubron ("el mito de Prometeo es crucial para explicar la condición de los primeros hombres, ya que es con el fuego con lo que podía protegerse de noche de los depredadores"). "Ocasionalmente recibía una carta suya out of the blue", me dice Thubron. "Simplemente quería celebrar algo que le había fascinado, como si no pudiera dejar de escribir sobre ello, y no precisaba de ninguna respuesta". Una de las cartas es a Eileen Gray, la nonagenaria arquitecta y diseñadora en cuyo apartamento Chatwin vio el mapa de Patagonia. "Vaya por mí", le dijo ella.

Hay en las cartas -en las que aparecen citados infinitud de personajes, Jan Morris, Michel Tournier (a propósito de las conexiones entre Los meteoros y su Colina negra), Peter Matthiessen- frases y descripciones maravillosas. "Los aborígenes australianos aunque infinitamente fascinantes son también infinitamente tristes", "las ovejas eran del mismo color dorado que la hierba agostada, un arco iris se elevaba de un lado a otro y bajo él una bandada de grajos alzó el vuelo centellando como diamantes negros".

Encontramos en origen algunas de sus citas más célebres: "Dentro de todo viajero un anacoreta está deseando quedarse". "El cambio es la única cosa por la que merece la pena vivir. Nunca aparques tu vida en un escritorio. Lo que sigue son las úlceras y los problemas cardíacos". "Tengo la compulsión de vagabundear y la de volver, como un ave migratoria". Una carta está dedicada al problema de conseguir las libretitas Moleskine, que él convirtió en icono del viaje.

Otras muestran a un Chatwin en horas bajas, indeciso, insatisfecho. Hay chismes y pequeñas bajezas. Un afán de socializar y aparentar. Resulta también terriblemente patético, o acaso entrañable, el empeño en sus penúltimas cartas por negar la evidencia del Sida y disfrazarlo de enfermedad glamourosa: "Malaria no diagnosticada cogida en el famoso viaje a Ghana", "el hongo que me ha atacado la médula ósea se ha identificado solo en diez campesinos chinos (presumiblemente es en China donde lo he cogido), unos pocos tais y una orca arrojada en las costas de Arabia". "Metabolizó su dolencia en algo rico y extraño", anotan su mujer y su biógrafo.

Aunque aparecen sus amantes, Teddy Millington-Drake, Andrew Batey, Jasper Conran o Donald Richards, no se encuentran en las cartas muchas referencias a las relaciones homosexuales de Chatwin. En realidad casi todas las que hay las ha de acotar Shakespeare porque si no resultan ininteligibles. Su espléndida y sugerente biografía (Bruce Chatwin, Muchnik Editotres, 2000) es infinitamente más explícita y reveladora en ese sentido y los dos libros se complementan como un todo.

Es difícil quedarse con una carta. Pero encuentro especialmente conmovedora la que envió a su padre para disculparse por haber explicado en En la Patagonia una historia desafortunada de su bisabuelo. "I am sorry".Como frase es notable la de una carta desde el Hotel Cabo de Hornos, en Punta Arenas: “ Mi mochila está tomando la más bella pátina”.

habito una ciudad o un campo de batalla

me cago en el eixample: La inseguridad del territorio

 

 

 

Si sobrevolamos jardines antiguos, los de Chantilly por ejemplo, nos damos cuenta de que tienen, en su conjunto, la misma importancia geográfica que una pradera en un bosque inmenso. Las alamedas, las circunvalaciones, los sistemas de riego, todavía sugieren algún trazado abierto por una tribu, un espacio restringido que ha sido ordenado y significado por una geometría social. Pareciera que alrededor en cierta medida, el hombre aún le ha dejado a la “naturaleza” la latitud de significar y legislar en su lugar. Esta última latitud tiende a desparecer totalmente a partir de mediados del siglo XVII. En esa época, hombres –que no son militares, ni arquitectos, ni ingenieros- pretenden enseñar el arte de “trazar campos y fortalezas”. Enseñan precisamente lo que por entonces se llama la castrametración –el arte de engañar por medio de trazos geométricos. No se trata aquí de un arte específicamente militar sino, tal como lo hace notar el coronel Lazard, de una suerte de reino de la geometría descriptiva, proyectada sobre la naturaleza, sobre los sitios. 

Al mismo tiempo, son distribuidos y fabricados los primeros instrumentos de medida suficientemente precisos como para establecer la situación de los lugares, el cálculo de los tiempos y de las distancias, de las altitudes, etc. Este tipo de ejercicio conoce una extraordinaria boga mundana y, poco a poco, renace en la sociedad policíaca la idea antigua: la geometría es la base necesaria para una expansión calculada del poder del Estado en el espacio y el tiempo… Inversamente, el Estado posee entonces dentro de sí una figura suficiente, ideal en la medida en que sea idealmente geométrica.

Felicidad suficiente también, ya que, según sus numerosos adeptos, en la geometría “lo verdadero y lo bello están íntimamente ligados” y, para el hombre honesto, la geometría se ha vuelto un arte, con sus satisfacciones estéticas, “la seducción de sus maravillosos encadenamientos de razonamientos”. Pero Fénelon, al oponerse a la política de Estado de Luis XIV exclama: “¡Guárdense de la hechicerías y los atractivos diabólicos de la geometría!”


Paul Virilio, La inseguridad del territorio, págs 121-126

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Llegan las cartas del nómada dorado | Cultura | EL PAÍS

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sábado, 8 de diciembre de 2012

Dave Brubeck - Take Five - 1966 IN MEMORIAM




La engañosa apariencia de saltarina facilidad que convirtió a Take fiveen el tema más célebre del cuarteto de Dave Brubeck (y en uno de los más famosos de la historia del jazz) persiguió para siempre a la figura del pianista y compositor californiano, que falleció ayer, precisamente un día antes de cumplir 92 años. Murió víctima de un paro cardíaco mientras iba camino de un hospital de Norwalk, Connecticut, para someterse a un reconocimiento, según informó Russell Gloyd, su productor durante más de tres décadas.
El apabullante éxito de la canción, compuesta en un ritmo de 5/4 por el saxofonista Paul Desmond, su compañero en el liderato del cuarteto hasta su disolución en 1967, condujo a malinterpretar a menudo a Brubeck y a su forma de comprender el jazz. La composición devino en estándar adorado por las masas, reclamado para sintonías televisivas y multitudinarios eventos deportivos, aunque visto con recelo por el sector más purista por su efectismo, cuando lo cierto es que aún hoy, con su mezcla de experimentación y comercialidad, perdura como una de las canciones más fascinantes del género.

Publicado por Columbia en 1959 dentro del disco Time out,convenientemente adornado en su portada con una pintura de aire vanguardista, ingrediente idóneo para completar la sofisticación intelectual capaz de seducir a la América previa a la revolución jipi, fue el primer álbum de jazz en alcanzar el millón de copias vendidas. También marcó la culminación de las aspiraciones del grupo que Brubeck había fundado a principios de los cincuenta junto a Desmond.
Asociada a la corriente del jazz de la costa Oeste, que vino a ofrecer desde California un contrapunto fresco y soleado a las escenas, nocturnas y fuertemente influidas por el blues, de ciudades como Nueva York y Filadelfia, la banda se hizo un nombre gracias a sus giras por las asociaciones estudiantiles de universidades de todo el país, antes de que el jazz perdiese definitivamente en favor del rock and roll su poder de influencia en la juventud.
Algunos de aquellos conciertos, recogidos en álbumes como Jazz at Oberlin o Jazz at the College of the Pacific (ambos en el sello de San Francisco Fantasy), relucen hoy como joyas para los aficionados atentos. Si bien quedaron ensombrecidas por su obra posterior, le sirvieron para convertirse en el primer músico de jazz moderno (y uno de los pocos de todos los tiempos y categorías) en ocupar en noviembre de 1954 la portada de la revista Time.
Nacido en Concord (cerca de San Francisco) en 1920 como el hijo de un ganadero y una directora de coro, interrumpió sus estudios para servir durante la II Guerra Mundial. Su acercamiento cerebral y meticuloso a la composición fue tanto herencia de sus años de estudio junto al francés Darius Milhaud como consecuencia de su inagotable afán por conocer nuevas formas rítmicas en sus giras por Japón, Europa o Asia. Como prueba de su gusto por la contaminación estilística se erige otra de sus inmortales canciones Blue Rondo à la Turk, cuya inspiración le llegó paseando por las calles de Turquía, durante uno de los viajes que emprendió la banda financiados por el Departamento de Estado, en los lejanos tiempos de la guerra fría en los que el jazz era visto como arma propagandística.
Los años a caballo entre los cincuenta y sesenta fueron tremendamente prolíficos para Brubeck y los suyos: de Ellington a West Side story, de la puerta de Brandeburgo a Walt Disney, cualquier pretexto parecía en aquel tiempo suficiente para armar un repertorio y grabar un disco en los estudios de Columbia.
El ímpetu optimista del músico se mantuvo intacto, ya sin Desmond (fallecido en 1977) y hasta el final de sus días, tanto en su faceta de compositor jazzístico como de piezas orquestales, divertimentos barrocos o cantatas. Se mantuvo activo sobre los escenarios hasta 2010. Tampoco cesaron las distinciones: Bill Clinton le concedió la Medalla de las Artes, mientras que Barack Obama lo incorporó al centro Kennedy por su aportación a la cultura estadounidense. Cuenta con una estrella en el paseo de la fama de Hollywood y el Grammy a toda una carrera.
Un documental, titulado Dave Brubeckin his own sweet way, en homenaje a una de sus más célebres composiciones y auspiciado por la producción ejecutiva de Clint Eastwood, celebró sus logros de una vida de dedicación al jazz. Un compromiso que en cierta ocasión definió así en The New York Times: “Una de las razones por las que creo en esta música es que en ella la individualidad del hombre halla su camino a través del ritmo del corazón. Y ese latido retumba por igual en todas partes. Es lo primero que escuchas al nacer y el sonido con el que la vida te despide”.
Llegado el momento de definitivo su adiós, le sobreviven su mujer, Iola (con la que trabajó en decenas de proyectos), así como cuatro hijos músicos y una hija.

viernes, 7 de diciembre de 2012

Basterrechea: “O debuxo permíteme ter un vocabulario áxil e facer cousas actuais”

Diario de Ferrol-2012-12-06-012-6caad61c



Basterrechea: “O debuxo permíteme ter un vocabulario áxil e facer cousas actuais”

reportaxe
m.j. rico
Suso Basterrechea é profesor nun bacharelato de artes (no IES Concepción Arenal), artista (como escultor e, nos últimos anos, fundamentalmente como debuxante) e, en breve, será concelleiro de EU en Ferrol, logo da renuncia de Yolanda Díaz para ocupar un escano no Parlamento Galego. Todas estas facetas son inseparables e na exposición que onte inaugurou en Sargadelos están unidas
Pero, á vez, o seu proceso creativo ten vida independente e fai que “Ratatatata-Machine Gun” amose unha raíz diferente.
Con estes debuxos, que empapelan, a xeito de instalación, toda a sala, fai unha pausa nun proceso que comezou precisamente aquí en decembro de 2005. Foi entón cando xirou desde o minimalismo das súas pezas escultóricas, longamente pensadas e preparadas, ó debuxo, que lle permite dar resposta instantánea ás urxencias que impón a realidade na política, na sociedade, na cultura e incluso na propia vida persoal do autor. “O debuxo permíteme ter un vocabulario moi áxil e facer cousas actuais. É unha expresión plástica que se amolda moi ben ós tempos. Eu necesitaba unha forma de traballar moito máis inmediata. O que fago é reprimirme o menos posible, respondo ós estímulos de forma directa. Para min a plástica é un instrumento da sociedade e nun tempo convulso como este ten que ser un instrumento posto ó servizo do combate no que eu me movo”.
Non hai que pensar, porén, en que o espectador vai atopar unha obra dogmática. Ó contrario, os debuxos de Basterrechea caracterízanse en primeiro lugar por cuestionarse a si mesmo, por reflexionar sobre o seu traballo e tamén sobre o que lle toca vivir. E faino co distanciamento que proporciona a ironía e coa ambigüidade de significados dos debuxos. Hai nesta mostra referencias á guerra, á violencia do Estado, ás reivindicacións cidadás; reflexións sobre a arte contemporánea con homenaxes a Kippenberger, Wert, Beuys ou Juan Muñoz; figuras humanas e tamén humor. E hai moita letra –“cada vez máis”, di Basterrechea–, como unha forma, non de explicar o contido, senón para abrir os significados. “Ten que ver coa necesidade de ser un pouco irónico porque hai imaxes que son brutais”. 
Esta linguaxe directa, na que teñen moita influencia os seus alumnos, sérvelle ademais para achegarse a un público máis amplo, a “conectar con moitos tipos de espectadores”. Cos seus debuxos a xente “pode divertirse, ten moitas lecturas e están cargados de textos e de matices”.
A exposición de Sargadelos chega xusto despois de inaugurar outra (o 29 de novembro) na galería Paula Alonso de Madrid. Agora imponse unha pausa, non para abandonar esta corrente, pero si “para reflexionar sobre outras posibilidades”.

lunes, 3 de diciembre de 2012

BOCA - palavras que alimentam: Sobre o festival da Ler e os seus cinco acontecimentos audiolivrescos

BOCA - palavras que alimentam: Sobre o festival da Ler e os seus cinco acontecimentos audiolivrescos


Sobre o festival da Ler e os seus cinco acontecimentos audiolivrescos

Começa amanhã, terça-feiradia 4 de Dezembro, a festa dos 25 anos da revistaLer. Da vasta programação que se apresenta no Cinema São Jorge em Lisboa atédomingo, dia 9, fazem parte cinco eventos produzidos pela Boca, todos de entrada livre e gratuita. São eles:


CONTOS SEM LEI | quarta-feira, dia 5, às 22h, na Sala 2 [Sala Montepio]
Uma sessão de contos para adultos com Rodolfo Castro



LEITURAS EM VOZ ALTA | quinta-feira, dia 6, às 17h45, no Bar/Foyer
Nuno Moura lê Memórias de um Craque, crónicas futebolísticas de Fernando Assis Pacheco



DEBATE E APRESENTAÇÃO | sexta-feira, dia 7, às 18h30, na Sala 2 [Sala Montepio]
B. Fachada, José Mário Silva, Marta Lança, Rui Zink e Sara Figueiredo Costa apresentam a nova edição da Boca: de nada, de Alberto Pimenta [com seis encantadores prémios a sortear pelo público]



CONTOS À CONCERTINA | sábado, dia 8, às 18h45, na Sala 2 [Sala Montepio]
Apresentação de Contatinas, de Luís Correia Carmelo com Nuno Morão



CONTOS PARA CRIANÇAS DE TODAS AS IDADES | domingo, dia 9, às 11h, na Sala 2 [Sala Montepio]
Do Era, não era? ao 35 contos dos irmãos Grimm, com Carlos Marques, Luís Correia Carmelo, Maria Morais e Roldofo Castro.



"Nada", Alberto Pimenta.



A Boca orgulha-se de apresentar o primeiro audiolivro do grande poeta e performer Alberto Pimenta.
Aos 75 anos, o escritor regressa aos poemas curtos para um diálogo urgente
sobre as notícias do dia e de sempre, sempre as mesmas.
Como o grafito que ilustra a capa, este livro inscreve-se na linha de resistência a que as autoridades chamam vandalismo.

Interpretação: O Autor
Edição e sonoplastia: Oriana Alves e Nuno Morão, com o Autor
Gravação, mistura e masterização: Nuno Morão
Capa e paginação: Pedro Serpa, com o Autor, Oriana Alves e Nuno Morão
Letras da capa e versão do logotipo da editora: Luís Manuel Gaspar
Imagem da capa: fotografia de César Figueiredo
Imagem da contracapa: eclipse do Sol (observatório de Montevideu)

Áudio: disco 1 -- 19 faixas (46 min.); disco dois -- dezassete faixas (50 min.)


"Nada", Alberto Pimenta. Boca se enorgullece en presentar el audiolibro en primer lugar el gran poeta y artista Alberto Pimenta. A los 75, el escritor vuelve a poemas cortos para un diálogo urgente sobre las noticias del día y siempre, siempre . lo mismo ¿Cómo grafito que ilustra la portada, este libro cae en la línea de resistencia a las autoridades llaman vandalismo.Interpretación: El Autor edición y diseño de sonido: Oriana y Nuno Alves Morao, con el autor de grabación, mezcla y masterización: Nuno Morãoportada y formato: Pedro Serpa, con el autor, Oriana y Nuno Alves Moraoletras cubrir versión del logotipo y la etiqueta: Luis Manuel Gaspar Imagen de la portada: Fotografía de César Figueiredo imagen de la portada: eclipse de Sol (observatorio Montevideo ) Audio:.. 1.19 disco pistas (46 min) Disco dos-diecisiete pistas (50 min) . Grabado en los estudios de Senhora da Glória, entre julio y octubre de 2012 © Boca - palabras que nutren Ltd . [www.boca.pt]

Revista Ping Pong: Presencias reales: la poesía española actual

Revista Ping Pong: Presencias reales: la poesía española actual


Presencias Reales: la poesía española actual

Introducción 
por Ana Gorría 

La actual poesía española en sus diversas lenguas peninsulares supone uno de los alicientes literarios más atractivos de la España literaria contemporánea. En la última década, es destacable  la apertura a una tradición de carácter universal (en la que sobresale la recepción de las poética norteamericana y británica a través de la especial incidencia de la traducción y de las poéticas de autores latinoamericanos). Además dentro de la pluralidad de voces que se presentan, son destacables las relaciones que surgen entre el ensayismo contemporáneo y las artes plásticas. El objetivo de este proyecto implica la exposición y análisis de las poéticas contemporáneas en el contexto más amplio de la tradición universal. Se trata de dar cuenta de este panorama y de  trazar vínculos con la actualidad literaria dominicana. Así se leerán los poemas poniendo especial atención para observar y entender no sólo este panorama sino la posibilidad de tejer vínculos con la poesía latinoamericana y, en concreto, la desarrollada en la República Dominicana. 
Debido a la diversidad de tendencias de la poesía española actual se hace inevitable una muestra capaz de mostrar la heterogeneidad en la que reside la creación poética española, heterogeneidad que es una de las grandes riquezas de la actualidad literaria española. Por esta razón a la hora de proponer una selección de contenidos para la poesía que se está desarrollando durante el primer tercio del  siglo XXI en las distintas lenguas peninsulares he querido atender a poéticas presentes en las distintas colecciones de poesía del país y no solo en las editoriales con más presencia en el mercado editorial debido a su capacidad de distribución sino también a aquellas que, de una manera más humilde pero no por ello menos efectiva, participan en la construcción del tejido poético en la actualidad.
Un tejido poético en el que hay que subrayar la incidencia no solo de las tradiciones casticistas sino también el desarrollo y el diálogo poético con autores de diferentes tradiciones como la argentina, chilena o peruana (entre otras) que supone uno de los hechos más productivos en la configuración del actual horizonte de presencias poéticas. Algo que también se completa con la residencia en otros espacios lingüísticos de poetas cuya presencia en la construcción del tejido poético a partir de publicaciones o revistas literarias es preciso calibrar a la hora de valorar los hallazgos expresivos de la poesía española al mismo tiempo que sus deudas y relaciones con otros discursos como la filosofía o las artes plásticas.
A través de un cuestionario de diez preguntas, acompañado de  una selección poética,  presentaremos  a algunos de los protagonistas de la creación literaria española, dentro del mapa inagotable que son las propuestas poéticas en la actualidad y que ni el taller  que ofrecí  en junio en el CCE de Santo Domingo  ni los cuestionarios pueden llegar a agotar en las posibilidades de su conocimiento. De una manera u otra los poetas que presentamos constituyen algunas de las más firmes o prometedoras propuestas de la actualidad literaria española pero no agotan las posibilidades de su conocimiento. Con este cuestionario – y el taller al que complementa- confíamos en abrir la puerta al conocimiento de la diversidad poética española.
Los poetas seleccionados son los siguientes: Chus ArellanoEstíbaliz Espinosa,  Izaskun Gracia,  Ernesto García López,  Luci Romero,  Laia López Manrique José Luís Gómez Toré,  Isabel Bono Ernesto Estrella CózarRuth Miguel FrancoPablo López CarballoLuna MiguelAntonio LucasKepa MuruaOscar Curieses ,Yaiza Martínez, Elena Medel,  Martín López - Vega , David Leo José Fernández de la Sota Francisco javier Irazoki Hasir Larretxea Rebeka Yanke Branca NovoneyraAngel Cerviño Juan Andrés García Román Eli TolaretxipiMercedes Cebrián Patricia EstebanPablo García Casado Mariano Peyrou  y Javier Vicedo