jueves, 3 de septiembre de 2009

Javier Arroyo y El Lusitania Jazz Machine

Javier Arroyo y el Lusitania Jazz Machine

"Sur mira al sur"

2009    


el disco se puede conseguir en discos Mastropiero, pza. de


Wattenberg

-Valladolid-


Javier Arroyo Piano.- armónica y voz
  Pancho Brañas.- Batería (1, 10 y 11)
  Guillermo Morente.- Contrabajo
  Angela Muro.- Voz
  Julio Pérez.- Batería
  Paul Stocker.- Saxos alt/sop, flauta y clarinete bajo
  Pierre Thary.- Violoncello

  Juan Corrales.- Cante por toná y letra (3)
  Ahmed Leghlan.- Voz en poema Arena (12)

  Arroyo y Stocker “AS Jazz Duet”.- Arreglos

  Steve Jordan.- Grabación en concierto y mezclas
  Fernando Romero.- Grabación en estudio y mezclas.1,10,11,12
  Cheluis Salmerón.- Grabación en concierto (3 + 4, 5 y 9)

  Teresa Arroyo Corcobado.- Ilustración y diseño
  Carlos Montero.- Ejecución y dirección gráfica
  Holok.- Fotografía
  Valter Vinagre.- Fotografía (pág. 6)
  Nezha Qraou.-    Traducción (al árabe)
Con la colaboración de la Consejería de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León y el proyecto INTERRGEG III A Cooperación Transfronteriza España-Portugal.

por Andrés Hombría

Alguien
-no recuerdo quién y  la cita es pues imprecisa- dijo que todas las
felicidades se parecen entre sí y por el contrario los pesares son muy
diferentes. Por ello las músicas hechas de felicidades y pesares son a
la vez parecidas y distintas.

  Quizá ninguna música expresa mejor esa unidad de contrarios que el jazz.

Nacido de las improvisaciones de las bandas que acompañaban los
entierros (de negros) en Nueva Orleans cuando volvían achispadas del
cementerio, construido sobre marchas y canciones ligeras europeas
reapropiadas por los músicos negros de E.E.U.U. infiltrándolas de sus
propias armonías y rítmicas, todo en el jazz es contradicción: música
clásica de la población negra de E.E.U.U. es a la vez música popular de
(más de) medio mundo, porque es el ejemplo más acabado de música que
era ya mestiza antes de que se inventara "el mestizaje".


  Lusitania Jazz Machine, grupo "de geometría variable" nucleado por Javier
Arroyo, pianista y compositor pucelano-cacereño y Paul Stocker, saxofonista
británico recriado en Holanda con músicos surafricanos sobre los que planea
la sombra del que fue el más original de los percusionistas ibéricos, José
Antonio Galicia , hace jazz de manera casi "natural".

  Entiéndaseme, hacer música, de cualquier tipo, precisa de un
aprendizaje y los miembros del grupo llevan muchos años en ello, más de
30 en el caso de su líder. Claro que  hace falta saber para componer y
tocar jazz, pero además de sintaxis y técnica musical hay que tener
ganas de comunicar algo.

Como en todo arte realmente popular, en el jazz la estética no es
puramente formal, su estética participa de su ética. Cuando en su
segundo disco "Sur mira al sur", Lusitania Jazz Machine" versiona a
Pablo Guerrero -"A cántaros"-,
Nicolás Guillén y Viglietti -"Me matan si no trabajo"- o esa maravilla
de laconismo que es "El pozo María Luisa" no los "deconstruyen"
(signifique esto lo que signifique), los arropan de jazz.

  El disco empieza con una composición de Paul, termina con una de
Javier e incluye además de los ya citados otros cuatro temas de autor y
otro popular.

  Los cuatro acreditados son temas de músicos surafricanos, de los que
el más conocido es "nomali" de Hugh Masekela. En todos late ese
especial tono hímnico  que impregna el jazz de aquel país ... quizá
porque para muchos de sus habitantes la música no es un epígrafe del
apartado "empleo de tiempo de ocio".

  El otro tema popular, que, creo, no por casualidad se situúa en la
mitad del disco es "Rosinha", canción tradicional portuguesa arreglada
por Paul Stocker que el grupo interpreta en vivo (como sucede en 8 de
los 12 temas del disco), en este caso en el IV festival de Jazz de
Vila-Real. Su texto narra la desventura de una joven que abandona a su
madre para seguir a quien la hará desdichada. En sólo 8 versos están la
seducción, el lamento y la moraleja con esa economía expresiva de la
mejor poesía anónima.

  Y Ángela Muro los canta así, como se canta aquello que se sabe
valioso, no pretexto para pirotecnias vocales. E igualmente se puede
decir de todos, en particular del arreglista cuyo solo al soprano al
comienzo del tema transmite la tristeza sin patetismo de la canción.

  En definitiva, discos como este son reconstituyentes: le dan uno ganas de seguir escuchando discos nuevos.

                      Andrés Hombría Maté, agosto 2009.


Pozo María Luisa :                                                      


 


                      . . .                                         +                                          . . .      +    por Maguil

Segunda entrega de esta formación liderada
por Javier Arroyo, radicada en Extremadura pero que cuenta con músicos
del resto de la península ibérica, por tanto de Portugal, y de
californianos como Paul Stocker, músico ya europeo, pues lleva desde
los 70 en este continente: Holanda, Inglaterra, España.

Como en el disco anterior Milho Verde-
la obra jazzística de Javier Arroyo tiene dos referentes: los
materiales y la búsqueda de una voz propia dentro del jazz peninsular.

Sobre
lo primero –los materiales- aunque sorprendan para una formación de
jazz, nada que objetar. Trabajar sobre canciones de fuerte contenido
social y político puede sorprender al aficionado de nuevo cuño, pero
los perros viejos en el jazz estamos acostumbrados a lidiar con toros
como Archie Shepp, Carla Bley, Charlie Haden, Charles Mingus, Max
Roach..o en otros terrenos con morlacos como Robert Wyatt (Hasta
siempre Comandante!!)…así que ningún problema con temas como los que
Javier nos propone con más que interesantes arreglos: “Me matan si no
trabajo” poema de Nicolás Guillén con música del gran Daniel Viglietti,
“El pozo Maria Luisa” duro lamento de la mala vida de la mina o “A Cántaros
del cantautor extremeño Pablo Guerrro. Máxime cuando se hacen desde la
honestidad y el reconocimiento poético y musical. Arreglos eficaces que
les acercan a la sonoridad actual. Quizá la excelente y nítida
vocalización de Ángela Muro deba encontrar en ellos su “voz
personal”…diferente de otros contextos musicales. Tanto las grandes
vocalistas Jessie Norman o Barbara Hendricks lo consiguen. ¿Ensuciarla
un poco?...”tomar partido hasta mancharse”, eso también sirve para la
música, claramente en el jazz.

Además,
este problema de los materiales se resolvió en el jazz desde que los
músicos comenzaron: tanto con temas populares –Tin Pan Alley- como los
anónimos blues o temas prestados por las bandas callejeras
sureñas. Adorno lo remató en los 50 y 60 con sus escritos de ética y
estética musical: una música revolucionaria lo ha de ser tanto en el
plano estético como en el ético: temas, materiales de partida. Nono,
Berio, Ligeti lo llevaron a la práctica en la música contemporánea.

Javier Arroyo durante la postproducción en Graná. foto Paco Alvarado

Javier Arroyo durante la postproducción en Graná. foto P.Alvarado de casualidad.

¿El Sur?... muy
interesante la aproximación de Javier Arroyo…el sur del sur…Africa!. De
la mano de Paul Stocker –por su colaboración con la escena del jazz
londinense donde hay una gran colonia de músicos sudafricanos- nos
llegan temas como “Louis´song” del gran baterista Louis Moholo,
“Nomali” de Hugh Masekela o “Ntyila ntyila” escrita para la nunca
suficientemente reconocida Miriam Makiba o el rápido y alegre calypso
“Two sticks”. Excelentes elecciones que hacen –con el tema del propio
Stocker, “Alba”- que su colaboración sea un auténtico coliderazgo,
ayudando a crear una sonoridad propia, un hecho diferencial con el
resto del jazz practicado en España, muy influido –obviamente- por el
flamenco como este lo es por el blues, los ritmos cálidos y los temas de raíz popular, como los reseñados anteriormente.

Cierra
el álbum “Travesía y Arena” donde nos deja claro “de qué sur” le llegan
las influencias pianísticas a Javier Arroyo, inmejorables: Randy Weston
y Abdulah Ibrahim-Dollar Brand.

Un poco más debajo de Tarifa, claramente.
Un hallazgo veraniego que espero poder disfrutar en directo pronto.

In memorian, Javier Marijuán


Maguil 09

No hay comentarios:

Publicar un comentario